Furió, Paulino Enrique

Ejército Argentino - Coronel - Jefe de Inteligencia, G2, VIII Brigada de Infantería de Montaña

Paulino Enrique Furió ascendió al grado de teniente coronel en 1975. El 30 de diciembre de 1976 fue designado jefe de la División 2 de Inteligencia del Ejército, conocida como G2, hasta diciembre de 1977. En este cargo era miembro principal de lo que se denominaba “Estado Mayor”, órgano asesor y de asistencia al Comandante de la de la VIII Brigada de Infantería de Montaña, Jorge Alberto Maradona. Furió era allí el principal responsable de “todos los aspectos relacionados con el enemigo” y director de las actividades de reunión de información y su procesamiento. Integró la Comunidad Informativa, donde se reunían los datos recabados por las Fuerzas Armadas y de seguridad para armar el esquema de inteligencia. Durante el tercer juicio, Furió quiso deshacerse de responsabilidad argumentando que su labor estaba enfocada en un posible conflicto bélico con Chile y negó conocer los hechos que se le atribuían. Sus palabras entraron en contradicción con un escrito de 1980 donde él mismo confirmaba los operativos de los que fue responsable, al querer fundamentar un pedido de ascenso.

Condenas

Fue absuelto en el segundo juicio de Mendoza por la desaparición de Jorge Fonseca, en el marco de la persecución contra militantes del Partido Comunista Marxista Leninista. Sin embargo, obtuvo su primera condena a prisión perpetua tres años después, en el tercer juicio, por las demás víctimas del operativo mencionado. El cuarto juicio lo halló responsable de innumerables delitos, incluida la sustracción de una menor de 10 años (Celina Manrique Terrera) y el ocultamiento de su identidad, por los que recibió una segunda condena a prisión perpetua. Fue apartado del sexto juicio por deterioro cognitivo.
Fuente: Memorias de los juicios por delitos de lesa humanidad (Mendoza, 2010-2018)

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El Colectivo Juicios Mendoza se conformó en 2010 por iniciativa de los Organismos de Derechos Humanos para la cobertura del primer juicio por delitos de lesa humanidad de la Ciudad de Mendoza. Desde ese momento, se dedicó ininterrumpidamente al seguimiento, registro y difusión de los sucesivos procesos judiciales por crímenes cometidos durante el terrorismo de Estado.