16-05-22 | Norberto Mercado negó responsabilidades y reiteró que no tenía funciones de mando, sino que seguía las órdenes de sus superiores de la Policía y las emanadas por el Ejército. Pidió que se investigue a la testigo María Esther Dauverné, que lo involucró en este juicio, por «falso testimonio». Se conoció por lectura la declaración indagatoria de Mario Ocampo sobre la desaparición del soldado Félix Ordenes. La próxima audiencia será el 1 de junio a las 9:30.
Mercado se retrató a sí mismo como un simple subordinado
«No existe en este juicio prueba alguna ni por testimonios ni constancias en el libro que me indiquen como autor de lo juzgado. No es correcto sino totalmente subjetivo lo expresado por fiscalía. Yo no era jefe de División Cuerpo”, se excusó. Esta última abarcaba Infantería, Canes y Motorizada de la Policía de Mendoza en San Rafael. El imputado insistió en que los “hechos fueron debidamente juzgados y con aplicación de sentencias en el primero y segundo juicio”, en cuyo debate no se lo nombró. De esta manera resumió su situación Norberto Mercado, uno de los imputados en el décimo primer juicio de lesa humanidad cuya acusación acumula la mayor cantidad de víctimas.
Mercado se refirió a la detención de Alfredo Porras, de Hugo Riera y de Hugo Magallanes, sobre las cuales dijo no tener responsabilidad. «Porras aclaró que había un capitán a cargo del personal militar que ingreso a su casa, mientras que el personal policial quedó afuera. Yo tenía amistad con el doctor Porras, así que me hubiera conocido si hubiera participado. Este tribunal escuchó al doctor Porras. Dijo que lo detuvo la Policía, pero jamás la Motorizada (…) todo lo que estaba en calle Segovia era militar y el único policía era Mussere», señaló. «Cuando liberaron a Tripiana, miramos por la mirilla de la puerta y vimos que había personal militar y había un médico que le preguntó si le habían pegado”, agregó.
Sobre la detención de Riera, apuntó que «fue en el Correo, adonde concurrió a preguntar por su esposa”. De acuerdo a Mercado, luego fue conducido a División Cuerpo, donde él no lo recibió. Allí “fue interrogado por personal del Ejército sobre su actividad gremial y por Susana Sanz», indicó. En una oportunidad el imputado se cruzó con Riera en el patio del predio y este le preguntó si podía ayudarlo, a lo que Mercado respondió de forma negativa. «Riera ni en esa oportunidad ni en otra jamás me hizo cargo ni preguntó sobre lo que su esposa María Esther Dauverné dijo en este juicio».
Sobre Hugo Magallanes, cuya segunda detención se le adjudica a Mercado, Mercado recordó que fue detenido por Gendarmería en Malargüe. «Llegó en un Unimog de Gendarmería con custodia de esa fuerza de seguridad. Desde allí es trasladado a División Cuerpo donde no lo recibo ni tengo trato con él», indicó. «Así ocurrió con los demás detenidos o privados de la libertad de que se me acusa. Debo reiterar que no procedí a la detención de las 18 personas que me adjudica fiscalía, ni ordené las mismas ni ordené traslados o movimientos (…) porque no estaba a cargo ni tenia autoridad para eso», remarcó Mercado.
El imputado aseguró que en las detenciones del «operativo febrero» no participó pues estaba de franco, «autorizado para cambio de destino”. Concluyó: “Todo eso consta en libros».
Mercado solicitó al tribunal cotejar en audio la declaración de Dauverné en el segundo juicio y ordenar compulsa y procesamiento “por evidente falso testimonio”. “Lo solicito en respaldo de mi defensa. Yo no ingresé a la Policía de Mendoza para atormentar, torturar o asesinar personas ni para detenerlas caprichosamente, sino para establecer el orden público, que consiste en la conservación de la persona o la propiedad».
Preguntas de la fiscalía y la defensa
Tras su declaración, Mercado fue indagado por el fiscal Pablo Garciarena. Su defensor, Ariel Civit, también le hizo algunas preguntas.
Garciarena consultó por el cargo que ocupó desde el 23 febrero del 76 a junio del 76. El acusado respondió que el 23 de febrero era encargado de Relaciones Públicas de la Policía pero estaba de vacaciones, y el 25 debía cambiar de destino. El 28 de febrero empezó a trabajar en División Cuerpo y trabajo allí hasta el 30 de julio de ese año. Luego lo interrogó por la función que cumplía. Mercado explicó: «Yo era jefe de Motorizada, la función era organizar y formar la parte activa del comando radioeléctrico, acondicionar los vehículos. También estábamos a cargo de la prevención de la actividad delictiva. No teníamos facultades judiciales, no podíamos tomar declaraciones ni las cosas que sí podían las comisarías».
Luego detalló que División Cuerpo tenía funciones para «activar y facilitar la prevención del delito, colaborando con la comisaria y a veces estaban superadas. Y ahí estaba el trabajo de Motorizada. Había unas seis o siete personas en toda la División Cuerpo. Por arriba mío estaba David Masachesi. Yo era oficial principal».
Aseguró que su servicio era diurno y que tenía varias salidas, pero «a operativos normales”. Los operativos “antisubversivos” se hacían en la noche: “Avanzada la noche, yo no estaba ahí».
La fiscalía le recordó a Mercado que aparece en varios asientos escritos que él era el segundo jefe de División Cuerpo, que incluía a Canes, Motorizada e Infantería. Mercado dijo que estaba designado como jefe de Motorizada y segundo al mando de la División Cuerpo. Sobre las tareas que desempeñaba, apuntó que debía responder a los requerimientos del Comando. «El Comando tenía una radio instalada, de ahí el jefe militar daba la orden ‘necesito dos patrullero o tres patrulleros’, no decía a qué se iba con los patrulleros. No decían por escrito las cosas, para eso tenían la radio. La División Cuerpo estaba a disposición de los requerimientos del comando militar, como anexo a las tareas policiales», se explayó.
Civit, en tanto, preguntó si los presos políticos estaban en Canes y quién los custodiaba. Según Mercado, los custodiaba el Ejército. Agregó también que los movimientos se hacían por orden de Mussere y López. Negó que su jefe, David Masachesi, pudiera disponer de la libertad de detenidos.
La desaparición del soldado Órdenes
Tras la declaración de Mercado se leyó la indagatoria a Mario Ocampo, ocurrida el 12 de diciembre de 2011, que versaba sobre la deserción del soldado Félix Órdenes, cuya desaparición se aborda en este juicio. Ocampo negó los hechos que se le imputan y aseguró que no tenía autoridad para designar un franco —el soldado desapareció luego de un franco—. De acuerdo al imputado, él firmó el papel de su salida porque seguro no se encontraban los otros jefes y porque no encontró inconvenientes. Sostuvo que este soldado podría ser “un desertor más”, y que «se lo tomó como un caso de deserción simple de cualquier soldado”.
La próxima audiencia será el miércoles 1 de junio a las 9:30
