24-08-17 / El día de hoy se realizó una inspección ocular en la Compañía de Comunicaciones de Montaña VIII. Los testigos que guiaron el circuito fueron Mario Gaitán, Ricardo Alliendes y Oscar Guidone. Durante el recorrido las víctimas aclararon que el sitio está cambiado respecto de 1976. De todos modos, pudieron reconocer e ilustrar sus recuerdos.
Por decisión del Tribunal se realizó una inspección ocular a la Compañía VIII de Comunicaciones, ubicada sobre la Avenida Boulogne Sur Mer, dentro del predio del Ejército. Los tres exdetenidos, citados para la ocasión, fueron muy descriptivos al reconocer el lugar y la disposición de las cosas en la época en la que estuvieron. Acompañaron el recorrido el juez Daniel Cisneros, la secretaria Natalia Suárez –presidente y secretaria del Tribunal, respectivamente-, Daniel Rodríguez Infante por la Fiscalía y Leonardo Pérez Videla por la Defensoría.
A Mario Roberto Gaitán lo llevaron a la Compañía de Comunicaciones el 12 de junio de 1976. Entró con otros compañeros entre quienes señaló a Hermes Ocaña. Por esa razón fue quien hoy marcó el camino hasta donde estaba el barracón en el cual estaban detenidos. Guidone llegó allí el 2 de junio de ese año y, aunque no pudo ver por dónde entró, coincidió con Gaitán en que estuvieron en el edificio del medio de tres que eran iguales.Ninguno de ellos existe en la actualidad.
Ricardo Alliendes, por su parte, fue trasladado a la Compañía de Comunicaciones caminando con otros cinco o seis detenidos desde el Liceo Militar General Espejo. Los escoltaban soldados uniformados y armados. Describió un lugar distinto al de los otros dos testigos y no pudo asegurar que fuera el mismo. También había tres edificios, él estaba en el del medio y los separaba un patio de los otros. Señaló donde estuvo él, a unos 200 metros del otro barracón, había unas 60 personas. Describió tres filas de literas y dijo que aún quedaban espacios vacíos donde entraban más detenidos.
Calculó haber estado allí, aproximadamente, diez días, hasta el 1 o 2 de junio del ‘76. Compartió cautiverio con su padre. Su mamá y su hermana estuvieron detenidas en el Casino de Suboficiales. Por comentarios que hacía el teniente Migno, “el lugar de las mujeres estaba cerca”.
“En un lugar de La Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme…”
Con esa cita del Quijote, de Cervantes, arribó Oscar Guidone a la Compañía de Comunicaciones de Montaña VIII. Estuvo detenido en este lugar por casi cuatro meses en 1976. Él y Gaitán explicaron que afuera del barracón había un espacio cercado con alambre de púa y había soldados con ametralladoras cada 15 metros, aproximadamente. Unos reflectores en el perímetro iluminaban con luz muy intensa el Lugar de Reunión de Detenidos (LRD). Los baños estaban separados.
Dentro del barracón había más de 100 personas detenidas, “unas 120” sostuvo Gaitán. Tenían una sola puerta central de ingreso, las dos de los costados eran para la guardia. Guidone lo calificó como un auténtico campo de concentración nazi. Sus compañeros coincidieron.
Mario Gaitán quiso resaltar el lugar de torturas y explicó cómo se llegaba hasta ahí. Era el edificio que aún está en pie de la radioestación.
Alliendes, Gaitán y Guidone serán citados a declarar en Tribunales.
La próxima audiencia es el jueves 7 de septiembre a las 9.30hs.