Marcelo Rolando Moroy aparecía en la nómina de personal del D2. Prestó servicios de 1974 a 1984 con los grados de cabo, cabo primero y sargento. Se desempeñó en la División Investigación Informativa, en la Sección Reunión de la Información y en la División Custodia. Luego fue trasladado a la Comisaría 9 y retornó al D2 en 1986. Acogió el retiro voluntario en 1998 con el grado de suboficial mayor. Más de diez víctimas reconocieron su presencia en este centro clandestino.
También fue nombrado en la felicitación general como personal del Palacio Policial, en la denominada “lucha
antisubversiva”. Quedó evidenciada su participación en las patotas que realizaban los procedimientos violentos: durante el operativo de febrero de 1976 en la casa del matrimonio Rossi- Ferrón, un agente resultó herido. El D2 elaboró una lista de policías “testigos” que participaron del procedimiento ilegal, entre los cuales estaba Moroy.
Condenas
En la revisión de la sentencia del cuarto juicio recibió la condena de 18 años de prisión por los delitos cometidos contra los trabajadores bancarios Alberto Córdoba y David Blanco. También fue condenado a prisión perpetua como responsable de los crímenes sufridos por militantes de la Juventud Guevarista en el noveno juicio. Actualmente está siendo investigado en el décimo tercer juicio.
Fuente: Memorias de los juicios por delitos de lesa humanidad (Mendoza, 2010-2018) y crónicas del
noveno juicio.