01-12-21 | En esta audiencia se leyeron los testimonios de la hermana y dos hermanos de Félix Órdenes, el soldado desaparecido en 1976. Además, se presentó una lista de veinticinco testimonios que pidió incorporar la defensa de los expolicías Norberto Mercado y Oscar Pérez, de los cuales la fiscalía objetó dieciocho porque no fueron presentados en la instancia prevista para tal fin. El tribunal evaluará las razones esgrimidas por ambas partes y comunicará la decisión en la próxima audiencia, que será el 15 de diciembre a las 9.30.
Los hermanos del conscripto
A pedido de Ramiro Dillon, defensor oficial, se leyeron las declaraciones testimoniales de Blanca del Carmen Nievas, Luis Ventura Nievas y Juan Antonio Pedroza, hermana y hermanos del conscripto Félix Órdenes, quien desapareció mientras hacía el servicio militar en Campo Los Andes, a mediados de 1976.
Blanca del Carmen Nievas Velázquez declaró que vio a su hermano el 10 de agosto del 76 y un día después debía presentarse en Campo de Los Andes. En su testimonio dijo que nunca habló con él sobre los intereses de los militares y que su hermano no le contó que estuvo detenido en la Municipalidad, sino que se enteró por los juicios de lesa humanidad. También dijo desconocer las relaciones de su hermano con Rosa Luna y María Guerrero —apodadas Clara y Perla—, quienes le enseñaron a leer y escribir, aunque su madre le contó que con una de ellas había compartido cautiverio.
Respecto a Luis Ventura Nievas, en su testimonio indicó que nadie de su familia tenía militancia política, dijo que no conoció a Clara y Perla y que su hermano estaba contento con el servicio militar. Por último, se leyó el testimonio de Juan Antonio Pedroza. El testigo no recordaba la fecha en que vio por última vez a su hermano Félix. Agregó que pensaba que la detención de su madre estaba vinculada a dos chicas que la ayudaban con alimentos y asistencia en problemas del barrio. Dijo desconocer los motivos de las detenciones de Rosa Luna y de María Guerrero —creía que eran montoneras— y que su hermano no tenía militancia de ningún tipo. Por comentarios de compañeros del servicio, supo que le dieron un franco especial a su hermano debido a la salud de su madre, Félix salió de la compañía uniformado, hizo dedo y se subió a un auto blanco.
Le preguntaron al testigo si la desaparición de su hermano pudo haber estado vinculada a una institución política o gremial y señaló que eso no le constaba. Los tres testimonios coincidieron en desconocer que el Ejército tuviera algún interés en hacer desaparecer al joven y negaron que la familia hubiera ido a Campo de Los Andes a averiguar sobre el destino de Félix.
La discusión por nuevos testimonios
Ariel Civit, defensor de los expolicías Norberto Mercado y Oscar Pérez Fernández, pidió incorporar el testimonio de veinticinco personas que declararon con anterioridad y que, a su entender, permitirán «separar la paja del trigo» tras la ampliación de la acusación que les endilga responsabilidad en la desaparición de Dardo Montenegro, un joven pintor de General Alvear. En la lista que pasó Civit al tribunal figuraban Roberto Parra Gutiérrez Domingo Mauricio, Armando Dauverné, Bárbara Sessa, Edith Mortaroti, Rafael Vallejo, Fermín Mercado, Luis María Cabeza, Ramón Josepini, Walter Galilea, Roberto Carrizo, Walter Aquindo, Alfredo Garré, Robinson Julián, Raúl Oldani, Francisco Illescas, Tomás Gianoglio, Oscar Pinola, María Esther Dauverné, Amalia de Magallanes, Telio Rivamar, Mario Agustín Lemos, Lucio Olmedo, Juan Carlos Berón y Oscar Miguel Pérez Fernández.
La fiscalía objetó la mayoría de los testimonios argumentando que no fueron propuestos en la instancia debida. En tanto, el juez Piña ofreció dejar solo los indispensables para no alargar el proceso del juicio y por no haber sido ofrecidos en los tiempos que ordena la ley. «No queremos que esto se aproveche como una puerta para incorporar innecesariamente testimonios para que se prolongue este juicio», subrayó el magistrado.
Civit insistió en que muchos de los testimonios son fundamentales porque en el transcurso del juicio se agravó la acusación para sus defendidos y que esto resultó «una sorpresa». Además, remarcó que algunos de los testigos se contradijeron en sus declaraciones respecto, por ejemplo, de las responsabilidades de Mercado en la cadena de mando. Civit sostiene que Mercado y Pérez eran solo subalternos, sin capacidad de tomar decisiones en lo que fue el plan represivo en San Rafael.
«No pueden ser tratados estos juicios como otros que se tratan en estos tribunales. En estos juicios de lesa humanidad se dan situaciones complejas y eso no lo he señalado yo, sino los querellantes, el ministerio público y los tribunales. El ministerio ofrece nuevas pruebas y nunca se ha puesto oposición», señaló el defensor. Luego dijo que la nueva prueba se relaciona con la ampliación de la imputación de homicidio a Mercado.
«La fiscalía quiere tener un apego propio de una misa a la ley, en otros casos si ofrecen nuevas pruebas y en este caso se oponen a nuevas pruebas. Se reproducen testimonios en los cuales no hemos participado. Yo estoy en una situación de disparidad. El Ministerio Público corre en Ferrari y yo voy en una carreta con bueyes cansados», soltó Civit.
Luego se refirió específicamente al testimonio de María Esther Dauverné: «Trata de involucrar a Mercado en nuevas acusaciones que antes no las dijo. Se van dando determinados supuestos que ameritan nueva prueba, para equilibrar la situación ante acusaciones que agravan la condición de mis defendidos».
Luego propuso reducir la lista de testimonios, aunque reprochó que en los juicios de lesa humanidad «ha habido cierta flexibilidad para incorporar prueba. Claro que es importante, porque ahora Mercado se encuentra acusado por un homicidio, algo que no se trató en el otro juicio. Son testimoniales que no llevarían más de dos audiencias o tres».
Civit dijo que si no se le permitía incorporar estos testimonios «llegamos a una situación de oscurantismo, evitar que se ventilen las situaciones como han ocurrido». Y en ese sentido recordó que «Mortaroti le atribuye a Oscar Pérez un poder sobre la persona desaparecida que es Montenegro, y sin embargo este no tenía ningún vínculo con autoridades militares».
El juez Alejandro Piña resolvió que en la próxima audiencia se dará a conocer la decisión del tribunal sobre los pedidos de incorporación de testimonios.
La próxima audiencia será el miércoles 15 de diciembre a las 9.30.